Capitulo 48

¡Hola chicas! Sí, sé que seguramente querréis matarme por llevar una semana sin subir y no os culpo, al contrario, tenéis toda la razón de querer hacerlo pero no he podido subir antes por varias razones: la primera que tuve exámen el miércoles de recuperación (que no ha servido porque me ha vuelto a suspender con un miserable cuatro), la segunda es que el jueves me fui al parque de atracciones por lo que el viernes estaba cansada y no escribí, la tercera porque el fin de semana lo pasé en el pueblo y la cuarta que como el domingo ganamos la Eurocopa ayer me fui a ver a los chicos de la roja a Gran Vía. Y después de todo este rollo contándoos mi vida en verso, os dejo un capítulo (que al final no he podido hacerlo tan largo como quería) y deciros que la fic llega a su fin, claro, la primera parte ya que muchas (por no decir todas) habéis votado que queréis una segunda parte donde ya os aviso que no todo va a ser tan perfecto como en esta. Y ahora sí, os dejo ya que leais, no sin antes daros las gracias como siempre a todas y dar la bienvenida a las nuevas lectoras que se unen. Os quiero.

Hope you like it!

(Rose)

- ¿Seguro que lo llevas todo? –le pregunté a Liam antes de cerrar la puerta de casa.

- Que sí, pesada.-me contestó metiendo la maleta en el coche. Me senté en el asiendo del copiloto y pusimos rumbo al aeropuerto.

Era principios de noviembre y los chicos empezaban una gira por toda Inglaterra que duraría un mes. Cuando llegamos nosotros, los demás ya estaban allí y bueno, empezaba la parte más dura de todas: la despedida. Durante estos últimos meses habíamos pasado mucho tiempo juntos y nos habíamos hecho muy buenos amigos, se iba a hacer raro estar un mes entero sin escuchar sus idioteces. A mí, personalmente, se me iba a hacer muy extraño llegar a casa y no ver a Liam esperándome para comer o ver la televisión con él sentada en el sofá cada noche antes de irnos a dormir. Iba  a sentirme muy sola en aquella casa así que le pregunté a Carol si la importaba que me fuera a vivir con ella mientras ellos estuvieran fuera y su respuesta fue un “sí” más claro que el agua.

Parecíamos un equipo de fútbol ahora mismo, los diez abrazados en medio del aeropuerto, diciéndonos cuánto íbamos a echarnos de menos los unos a los otros. Dejamos el abrazo conjunto para ir despidiéndonos uno a uno. Abracé al mismo tiempo a Niall y Zayn dándolos un beso en la mejilla a cada uno después. Después me dirigí a Harry y luego a Louis.

- Cuida de mi pequeña y no montéis fiestas con chicos eh.-me dijo bromeando.

- Tranquilo, prometo que seremos buenas.-le contesté riendo abrazándole.

(Liam)

Estaba despidiéndome de las chicas, concretamente abrazando a Emma y Ashley y la vi a ella, ahí, despidiéndose de los demás. Llevábamos dos meses viviendo juntos y aún no había sido capaz de decirla nada, de decirla lo mucho que la quiero y lo mucho que la necesito a mi lado, que estoy enamorado de ella. Después de despedirme de las hermanas, lo hice de Carol y, más tarde, de Alice. Solo me quedaba despedirme de Rose, me quedé frente a ella, mirándola. Sonreí levemente.

- No sabes cuánto te voy a echar de menos.-dijo abrazándome fuerte.

- Y yo a ti.-dije abrazándola también. Me separé levemente.- Eh, eh, ¿esto que estoy viendo son lágrimas? –cogí su cara entre mis manos.- Ya verás como se pasa rápido y me tienes dándote la lata de nuevo.-La hice sonreír.- Así estás mucho más guapa.

- Gracias por todo Liam.-dijo sonriendo aún con alguna lágrima en sus ojos.

Era ahora o nunca. Tenía que hacerlo aunque pudiera parecer egoísta pero no quería que en este mes pudiera llegar alguien y perderla para siempre.

- Ro, puede que me odies por lo que voy a hacer.-dije mirándola a los ojos.- Pero no lo aguanto más.

- ¿Qué? –dijo extrañada y sin dejarla decir nada más, la besé. Al fin hice lo que llevaba tanto tiempo deseando hacer. Escuché la voz de megafonía que anunciaba nuestro vuelo.

- Me tengo que ir.-acaricié su mejilla por última vez.- Te quiero.- Y fui con el resto de los chicos a facturar.

(Carol)

En cuanto vimos a los chicos desaparecer al fondo del aeropuerto, volvimos cada una a su casa.

- Esta será tu habitación.-le dije a Rose que no había dicho ni una sola palabra en todo el camino.- Ro, ¿estás bien? –dije poniendo la mano sobre su hombro.

- ¿Cómo ha podido hacerme esto? –me preguntó.- ¿Por qué justo hoy que se va y no voy a verle en un mes?

- No lo sé, lo que sí sé es que te quiere y ahora lo sabes.-dije abrazándola.- Ya tendréis tiempo de hablar cuando vuelvan.-le sonreí.

(…)

Faltaban dos días solamente para volver a vernos. Tenía muchísimas ganas de poder abrazar y besar de nuevo a mi Lou. Le echaba de menos, más de lo que hubiera podido imaginar. Habíamos estado hablando por teléfono casi cada día pero no era lo mismo, le necesitaba aquí, conmigo.

Rose por su parte, había pasado todo el mes viviendo conmigo, y pensando en lo que había ocurrido en el aeropuerto, en cómo actuaría cuando volviera a ver a Liam en dos días. Y que decir de las demás, en estas semanas, las “noches de chicas” se habían convertido en una larga charla diciendo cuánto echábamos de menos a nuestros chicos.

Era jueves, por la mañana, por suerte, era fiesta en Londres y ninguna de las dos teníamos clase, pero como estábamos cansadas y hacía bastante frío, habíamos decidido quedarnos en casa, viendo películas en la tele.

Había subido a mi habitación a por alguna película mientras Rose terminaba de recoger el desayuno cuando llamaron a la puerta. Bajé rápidamente a abrir. No me pude contener y me abalancé sobre él.

- Mi pequeña.-dijo antes de fundirnos en un beso.

- Te echaba de menos.-dije aún sobre sus labios.

- Gracias, yo a ti también eh.-dijo Liam apareciendo por detrás.

- ¡Liam! –le abracé.- ¿Qué hacéis aquí? Se suponía que llegabais pasado mañana.

- Os mentimos, queríamos que fuera una sorpresa.-contestó Louis.

- Lo habéis conseguido.-dije sonriendo ampliamente.

- ¿Quién es, Carol? –gritó la voz de Rose desde la cocina.

- Ven a verlo tú misma.-respondí de la misma manera.

A los pocos segundos apareció Rose al fondo del pasillo y empezó a acercarse a la puerta con cara de asombro. Ella y Liam se quedaron mirándose, sin decir nada.

- Creo que deberíamos irnos.-le susurré a Louis y él asintió con la cabeza. Le cogí de la mano, llevándole fuera, cerrando la puerta detrás de mí.

- ¿Y ahora qué? –preguntó mirándome.

- Vamos a tu casa, estos dos necesitan hablar y creo que irá para largo.-sonreí y nos besamos de nuevo antes de subir al coche.

(Rose)

No me lo podía creer. ¿No venían en dos días? Debe ser que no, adelantaron el viaje por no sé que razón. El caso es que estaba aquí, otra vez, mirándome con sus ojos castaños, ¡cuánto había echado de menos que me mirara de esa forma! Llevaba una gorra puesta y decir que le quedaba bien es poco. Podía notar lo nerviosa que me estaba poniendo al verle de nuevo y esos nervios aumentaron al ver salir a Carol y Louis por la puerta. No me dejes sola con él, no, por favor. Tarde. Ya lo había hecho. ¿Y ahora qué? ¿Cómo se empieza una conversación cuando la última vez que nos vimos me besó y se marchó después de decirme un “te quiero”?

- ¿Ro? ¿Estás bien? –Su voz.

- Sí…No. Bueno, no sé.-rio ante mi comentario.

- Llevamos un mes sin vernos y eso es lo primero que me dices. Me esperaba al menos un “¡qué alegría que hayas vuelto!” o algo parecido.-dijo sonriendo.

- Creo que es mejor mi recibimiento que tu despedida.-dije poniendo los brazos en jarra.

- Tenemos que hablar sobre lo que pasó.-contestó.

- Vamos al salón mejor.-dije llevándole hasta allí. Nos sentamos en el sofá.- ¿Y bien? ¿Me vas a explicar por qué lo hiciste?

- Por que sí.-dijo.

- ¿Por qué sí? ¿Qué clase de respuesta es esa? –le interrumpí.

- ¿Quieres dejarme hablar? –dijo riendo.

- ¡Y encima te ríes! No le veo la gracia.-dije algo enfadada.- Me he tirado todo el mes pensando en ello, no he parado de darle vueltas a la cabeza…-